
Ricardo Hausmann ha diseñado en su cabeza los mecanismos para conseguir una intervención legal extranjera de carácter militar en Venezuela. Son, con toda probabilidad, imposibles y no habrá intervención militar extranjera.
Cuando Hausmann propone esta vía es porque contempla como imposible una acción militar directa del Ejército venezolano. Esa sería la única solución para Venezuela, es decir, un Francisco Franco. El problema es que el Ejército venezolano es rojo y está comprado por los rojos.
Mal porvenir le auguramos al pueblo venezolano que las va a pasar canutas. Sólo podemos desearles lo mejor pero, es verdad, lo hacemos desde el pesimismo. Venezuela será, si no lo es ya, otra Cuba.
Tomemos nota los españoles de lo ocurrido en Venezuela y recordemos los Ministerios y funciones que pidió Pablito Iglesias para llegar a un acuerdo de investidura con Pedro Sánchez: defensa, interior y el CNI. Tomemos nota y que no nos quepa duda alguna de por donde ve la jugada de Podemos en cuanto les sea posible.