
Los independentistas siguen con su estrategia basada en seguir deslegitimando a España y por otro lado aumentar el control sobre los votantes. Que hablen de «pucherazo» cuando todos vimos lo que pasó el 1-O en el que varias personas votaron en varios colegios, sin censo, sin listas, con las urnas en la calle, etc. clama al cielo.
Un pucherazo en las elecciones autonómicas del 21-D es casi imposible porque precisaría la complicidad de miles de personas. Los interventores y apoderados están para eso. Y los partidos supervisan y recuentan el resultado. El principal argumento es que la empresa que avanzará el recuento provisional la noche electoral es Indra, participada en un 18,7% por la SEPI (el Gobierno español) y muy dependiente de los contratos públicos. El rumor pasó a la dimensión pública cuando el portavoz de ERC, Sergi Sebrià, aseguró en rueda de prensa que su partido haría un «recuento paralelo» para evitar un fraude electoral. En el caso de que ésto sea así… ya sabemos el resultado.
NO mandaron ningún censo de NADA en ningún domicilio de NADIE, así que quien se inventa que fueron llamados a las mesas, no sé si sería por telepatía. O son los que se quedaron durmiendo en los pavellones o en las calles para ir a re-votar o hacer de mesa.
1) No mandaron ningún censo electoral de nada.
2) No tengo ni idea que es el famoso traspaso de datos de nadie si nadie recibimos nada.
Como todo: pfff quién sabe.