
El cuñado del Rey, ya está en prisión, ha ingresado esta mañana en torno a las ocho en la prisión de Brieva, esa prisión es sólo de mujeres, si bien por cuestiones de seguridad, ha sido la que le ha sido recomendada por sus asesores, y elegida por el marido de la infanta Cristina.
La entrada al centro se ha realizado de manera discreta y no ha sido recogida por los medios. Esta prisión además de recoger mujeres, tiene un pabellón especial con cinco celdas, patio propio, comedor y salas de vis a vis. Es de imaginar que las otras cuatro celdas, o estarán vacías o con presos de mucha confianza, que no generen ningún tipo de problemas al interno Urdangarín. De momento Cristina y sus cuatro hijos seguirán viviendo en Ginebra.
Urdangarin está condenado por malversación, prevaricación, fraude a la administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias. Su exsocio Diego Torres, que cumplirá condena en Can Brians 2, está condenado a cinco años y ocho meses por malversación, prevaricación y fraude a la administración.
Una vez en la prisión, el cuñadísimo habrá de pasar todos los trámites penitenciarios que se realizan tras el ingreso de los internos, será huellado, se le pasará un reconocimiento médico, y se le hará una entrevista por parte de un equipo compuesto por psicólogos y criminólogos y trabajadores sociales, dependientes de la junta de tratamiento, del informe que realicen saldrá la propuesta de clasificación en un grado u otro, aunque todo indica que pueda ser clasificado como preso de segundo grado, con algún, tipo de trato preferente dado el perfil personal del condenado, como por ejemplo la propia prisión en la que se le va a dar cabida, y el módulo «de respeto» en el que va a ser destinado.